Su etiología es: problemas de la mucosa intestinal: como la intolerancia a la fructosa o la celiaquía; alteraciones enzimáticas o de órganos digestivos o enfermedades infecciosas entre otras.
Entre sus manifestaciones encontramos la diarrea, la esteatorrea, las flatulencias y la pérdida de peso.
Para su diagnóstico se valorarán las manifestaciones clínicas, se realizará una analítica y se harán unas pruebas generales de absorción.
Su tratamiento varía mucho en función de la etiología del problema.
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